La vida está repleta de opciones; cada día, a cada momento, no nos queda otra que tomar decisiones. Queramos o no. Haciendo esto o aquéllo. O dejando de hacer.
Es inevitable no tomarlas. Es inevitable que de vez en cuando o a menudo nos asalten las dudas, los dichosos "y si..."
Los"te imaginas"... Imaginas.
Pero estás aquí. Fruto de las decisiones que has ido tomando por el camino. Consciente o inconscientemente.
Si eso es lo que quisieras, es donde deseas estar, ¿por qué no vas hacia ello?
Ideas y dudas me asaltan últimamente. Muchas.
Y no sé. No sé nada, eso lo tengo claro. Qué contradicción.
Estamos llenos de contradicciones también. Benditas contradicciones.
Seguir a tu corazón, sí, eso que notas que sale de dentro, eso que te hace ilusión, lo que te quita el sueño y hace que cuando te vas a la cama te cueste dormir porque le estás dando vueltas. Eso que te pone nerviosa. Pero para bien. Eso es lo que creo que hay que seguir. Pero a menudo no estamos entrenados para esto, o mejor dicho, nos hemos des-entrenado.
Decidir sintiéndonos plenos.
En ello estamos. En recordar hacerlo.
Salud y Luz
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